Cuba: Empresario repatriado pierde inversiones tras condena judicial
Un empresario cubano-alemán pierde todas sus inversiones en Cuba tras una controvertida condena judicial, exponiendo los riesgos para inversores extranjeros en la isla caribeña.

Casa colonial en Trinidad, Cuba, similar a la propiedad confiscada al empresario cubano-alemán Juan Carlos Hernández Mora
Un emprendedor cubano-alemán que regresó a Cuba después de más de una década en Europa ha perdido todas sus inversiones y enfrenta restricciones de movilidad hasta 2030, en un caso que ilustra los riesgos para inversionistas extranjeros en la isla caribeña.
De Alemania a Trinidad: Una inversión frustrada
Juan Carlos Hernández Mora, de 52 años, decidió repatriarse a Cuba en 2008 tras obtener la ciudadanía alemana. El empresario, quien se dedicaba a la enseñanza de salsa en Europa, invirtió en una casa colonial en Trinidad para desarrollar un negocio turístico, siguiendo las aparentes señales de apertura económica del régimen.
Este caso se suma a una serie de preocupaciones sobre las restricciones de derechos fundamentales en Cuba, donde las libertades económicas siguen siendo severamente limitadas.
Patrón de confiscaciones y procesos judiciales
En 2019, Hernández Mora fue imputado por supuestos delitos de proxenetismo, cohecho y fraude eléctrico en un juicio a puertas cerradas. La abogada Laritza Diversent, directora del Centro de Información Legal Cubalex, señala que estos casos son típicos en Cuba, donde las autoridades utilizan procesos legales para apropiarse de propiedades valiosas.
Impacto en las relaciones internacionales
El caso ha generado tensión diplomática, con el gobierno alemán brindando apoyo consular a su ciudadano. Esta situación refleja un patrón más amplio que afecta a inversores extranjeros, como demuestra la importancia de las garantías legales en las relaciones internacionales.
"El régimen puede prometer apertura, pero nunca renuncia al control absoluto", señala Diversent, destacando la persistente inseguridad jurídica para inversores extranjeros en Cuba.