Controversia por el Tren Lima-Chosica: Municipalidad y ATU difieren sobre plazos de implementación
La implementación del tren Lima-Chosica genera debate entre autoridades municipales y la ATU por diferencias en los plazos de ejecución. El proyecto, que incluye vagones donados por Caltrain, busca modernizar el transporte público en el este de Lima.

Vagones del futuro tren Lima-Chosica exhibidos en el Parque de La Muralla
Debate institucional sobre el nuevo sistema de transporte metropolitano
La regidora de la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), Roxana Rocha, ha generado controversia al contradecir los plazos anunciados por la Autoridad de Transporte Urbano (ATU) sobre la implementación del tren Lima-Chosica, evidenciando tensiones entre las instituciones reguladoras del transporte público.
Discrepancias en los plazos de ejecución
Mientras la ATU proyecta el inicio de operaciones para 2025, la funcionaria municipal asegura que el servicio podría estar operativo en menos de seis meses, una diferencia temporal que genera interrogantes sobre la coordinación interinstitucional.
"Para ello se necesita sacar un concurso de manera transparente, totalmente competitivo y que venga el mejor operador que tenga el título habilitante", afirmó Rocha durante una entrevista televisiva.
Aspectos técnicos y operativos pendientes
El proyecto requiere una compleja coordinación entre múltiples actores:
- Ferrocarril Central Andino: responsable del material rodante
- Ferrovías Central Andino: a cargo de la infraestructura ferroviaria
- El futuro operador seleccionado mediante concurso público
- El Ministerio de Transportes y Comunicaciones como ente regulador
Modernización del transporte público
La iniciativa representa un paso significativo hacia la modernización del transporte público en Lima, con la incorporación de vagones donados por la empresa estadounidense Caltrain. Este proyecto se enmarca en los esfuerzos por mejorar la movilidad urbana en el sector este de la capital peruana.
La implementación de este sistema de transporte masivo requerirá una gestión eficiente y transparente, así como una clara coordinación entre las diferentes entidades involucradas para garantizar su éxito operativo.